Un paseo desde Santa Gertrudis hasta el pozo d'en Gatzara siempre es agradable, pero ahora en otoño aún más, cuando la calor no aprieta.
Aparte de las leyendas que aseguran que es un lugar mágico, este pozo está considerado como el centro geográfico de la isla y es Bien de Interés Cultural desde 2003. En él se celebra una ballada popular en el mes de octubre, coincidiendo con las fiestas del pueblo, aunque este año no se ha celebrado todavía debido a las lluvias que han caído estos días. Antiguamente la ballada se celebraba el 25 de julio.
Una de esas leyendas cuenta que hubo un tiempo en el que el brocal del pozo daba al camino, pero se le dio la vuelta para que el agua no viera pasar a los difuntos camino del cementerio. No debemos olvidar que el culto al agua está muy arraigado en la cultura mediterránea, así que no es de extrañar este tipo de supersticiones. Claro que, a lo mejor no lo son tanto...
Nosotros, por si acaso, lo seguiremos visitando, pero no le daremos la vuelta al brocal!
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